Un pez que hace nidos en forma de círculo en el fango marino, una
rana que pare a sus renacuajos en vez de poner huevos, una avispa que
protege su avispero con hormigas muertas, una araña que huye haciendo
volteretas y el dinosaurio más parecido a un ave nunca descubierto
forman parte de las primeras diez especies del ranking que cada año
realiza el comité internacional de investigadores liderado por el doctor
Quentin D. Wheeler, del Instituto Internacional para la Exploración de
Especies (IIEE), entre las 18.000 nuevas especies que se descubren cada
año en todo el mundo.
El 'Top 10 Species' descubiertas en 2014
se publica este jueves 21 de mayo para celebrar el aniversario de Carlos
Linneo, el botánico sueco del siglo XVIII considerado padre de la
taxonomía moderna, con el objetivo de concienciar a la población sobre
la importancia de conservar y conocer la biodiversidad.
Así, el
Museo Nacional de Ciencias Naturales del Consejo Superior de
Investigaciones Científicas (CSIC) expondrá las imágenes de esta decena
de especies. Según los científicos existen unos 12 millones de especies
aún por descubrir en el mundo, es decir unas cinco veces más de las que
ya se conocen.
Para el doctor Wheeler, fundador del IIEE, "la
biodiversidad es un territorio inexplorado"--. "La ciencia solo acaba de
empezar a estudiar su asombrosos orígenes, historia y diversidad", ha
destacado.
El coordinador del comité de selección de la Top Ten
e investigador científico del MNCN, Antonio G.Valdecasas, ha subrayado
que conocer las especies que pueblan el mundo puede aportar información
sobre las distintas maneras de vivir en la Tierra y, potencialmente,
proyectar en tecnología innovadora lo que otros organismos han
desarrollado para solucionar sus propios problemas.
"Descubrir y
nombrar organizar lo viviente por parentescos nos pone en la vía
adecuada para entender el desarrollo de la vida sobre nuestro planeta",
ha manifestado.
Asimismo, completan la decena de especies
destacadas de 2014 una planta parasitaria que se asemeja a un coral y
que ya ha sido declarada en peligro de extinción; un insecto palo que ha
demostrado ser un maestro del camuflaje; una araña que huye haciendo
volteretas como si fuera una acróbata; un organismo multicelular que se
parece a una seta y, además o una planta de sobra conocida por los
indígenas mexicanos pero desconocida para la ciencia completan las
especies Top 10 descubiertas durante 2014.
En el 'top one' está
la 'Dendrogramma enigmática', una especie aparentemente relacionada con
las medusas y corales. Se trata de pequeños animales parecidos a las
setas, con una boca en el extremo del 'tallo' y el otro extremo con la
forma de un disco aplanado. La especie se encontró en los fondos marinos
de Point Hicks (Australia) a más de 1.000 metros de profundidad. Miden
unos 8 milímetros de largo y el disco superior apenas supera los 10
milímetros.
El segundo puesto lo ocupa el 'Torquigener
albomaculosus', los nidos que construyen los peces macho de esta nueva
especie. Resulta que los científicos llevaban 20 años intentando
averiguar el origen de unos círculos de unos dos metros de diámetro con
diseños geométricos de los fondos marinos de la isla de Oshima, una isla
volcánica del Océano Pacífico.
Los machos los preparan para
atraer a las hembras y además las crestas y ranuras sirven para
minimizar el efecto de las corrientes, y posiblemente evitar los ataques
de depredadores.
La medalla de bronce de 2014 es para el
'Phryganistria tamdaoensis', un nuevo insecto palo que no es el más
largo de mundo aunque pertenece a una familia conocida como palitos
gigantes. En concreto, mide unos 23 centímetros de largo y es "un
maestro del camuflaje", ya que se ha encontrado en el Parque Nacional de
Tam Dao (Vietnam), donde ha pasado desapercibido durante años para los
entomólogos que trabajan en la región. Este insecto palo gigante se
puede observar en vivo en Bruselas, en el Royan Belgian Institute of
Nature Sciences. Sin embargo, el insecto palo más largo que se conoce es
el Phobaeticus Chani que, con más de 56 centímetros, fue encontrado en
Nueva Guinea.
En cuatro lugar se ubica el 'Anzu Wyliei', que es
contemporáneo de los dinosaurios como Tiranosaurius rex o el
Triceratops, y es el dinosaurio más parecido a las aves que se conoce.
Se trata de un omnívoro, que vivía en llanuras inundadas y comía
vegetales, pequeños animales y huevos. Anidaba e incubaba sus huevos
hasta su eclosión, tenía los huesos huecos, plumas y un pico similar al
de los actuales loros. La especie que medía unos 3,5 metros de largo y
1,5 de alto y pesaba entre 200 y 300 kilos, fue descubierta en un
yacimiento de Dakota del Sur (EEUU) donde se encontraron tres
esqueletos.
Dado que
vive en el desierto, donde no hay lugar para esconderse, los
investigadores consideran que esta estrategia es la última baza del
arácnido para librarse de sus depredadores. Su forma de actuar ya ha
inspirado la creación de un robot que copia su forma de moverse.
En el puesto número seis, está la 'Deuteragenia ossarium' una avispa
encontrada en la reserva natural de Gutinashan (China). Mide unos 15
milímetros de longitud y construye nidos en tallos huecos que separa en
varias secciones con paredes. En cada una de las secciones la avispa
pone un huevo y deposita una araña que servirá de alimento a la cría. La
última de las celdas del nido la llena con hormigas muertas que crean
una barrera química para prevenir la presencia de depredadores.
En cuanto a la
'Limnonectes larvaepartus', que se sitúa en el octavo escalón, por ser
una excepción entre las ranas, que ponen huevos de los que eclosionan
renacuajos. En este caso, la rana da a luz a los renacuajos y los
deposita en los charcos de agua. Menos de una docena de las 6.455
especies de ranas del mundo tienen fecundación interna y todas, excepto
esta ponen huevos fertilizados o dan a luz a pequeñas ranitas. La
especie, que mide cuatro centímetros ha sido descubierta en la isla
indonesia de Célebes.
En el penúltimo puesto se ubica la
'Tillandsia religiosa', una especie que era "de sobra conocida" por los
habitantes de la Sierra de Tepoztlán (México), que la utilizan para
decorar los altares navideños, esta planta acaba de ser descubierta para
la ciencia. La planta llega a medir metro y medio y florece entre
diciembre y marzo, y crece de forma aislada en zonas rocosas de entre
1.800 y 2.100 metros de altitud.
Finalmente, la planta 'Balanophora coralliformis', en décimo puesto, fue recién descubierta en
el listado de especies amenazadas. La especie, recién descubierta, ha
entrado en el listado de especies amenazadas, es un parásito cuya
estructura alargada y con numerosas ramificaciones le da aspecto de
coral.
Las plantas parasitarias no contienen clorofila y son
incapaces de hacer la fotosíntesis, por eso obtienen los nutrientes que
necesitan para sobrevivir de las plantas que parasitan. Esta especie, de
la que solo se han encontrado 50 ejemplares, vive entre 1.500 y 1.750
metros de altitud en bosques húmedos de Filipinas.